Nuestra guía de los Países Bajos, porque este es su verdadero nombre intenta mostrar algunos de los atractivos de este país tan interesante de Europa occidental. Holanda es un pequeño país situado en la desembocadura de varios de los ríos más importantes del continente, un país de llanuras, canales, pólderes y diques, un país que comparte mucha de su historia y geografías con Bélgica y Alemania, pero también por conflictos, comercios y visitados con Gran Bretaña. Francia, Austria y España.
Hoy Holanda, o los Países Bajos es uno de los países más desarrollados y prósperos del mundo, un país que ha pasado de depender de la agricultura a ser tierra de grandes empresas y avances industriales y tecnológicos. Y, sin embargo, a pesar de todo, Holanda ha mantenido un paisaje natural, humanizado, es cierto, pero no excepto de bellezas y monumentos que atraen, año tara sao a millones de turistas e todo el mundo.
Los Países Bajos, el país submarino.
Holanda surgió arrebatando la tierra paso a paso al mar del norte, desarrollando canales diques, desecando una naturaleza complicada y siempre amenazada por el mar. De esa tierra conquistada surgieron avances agrícolas y después un espíritu comerciante que surcó todos los mares de la tierra. En la Edad Media las tierras de Holanda dependían del Ducado de Borgoña, que por unión dinásticamente quedaría englobado en el Imperio de los Habsburgo, o lo que viene a ser lo mismo, La Corona de España. Contra ella los Países Bajos lucharon en la guerra de los 80 años 1568-1648, que finalizó con el Tratado de Westfalia y la independencia de los Holanda.
Los Países Bajos serán una verdadera potencia comercial y marítima durante el XVII y el XVIII creando un Imperio colonial basado en el comercio en África, Asia y América. Invadida durante la Revolución Francesa, las Guerras Napoleónicas y la II Guerra Mundial, inmortalizada en muchas novelas y películas, Holanda volvió por la senda del desarrollo durante la Guerra Fría. Grandes empresas holandesas tienen gran influencia en la economía europea y mundial, como Shell, Unilever, Philips, Aegon, los bancos ING o Rabobank, Heineken, TNT o Randstad dan una idea de lo moderno y desarrollado que es el país.
Desde la Edad Media el territorio ha sido transformado y hoy casi la mitad de su territorio se encuentra al nivel del mar o por debajo de éste. El dominio de la ingeniería hidráulica en Holanda es altamente desarrollado, así como los canales y vías marítimas que comunican todo el territorio. Los antiguos molinos que servían para drenar los campos y la agricultura han sido substituidos por plantas eólicas y solares que hacen de los Países Bajos un país relativamente ecológico y energéticamente verde. Y eso, a pesar de tener una gran compañía petrolífera, Shell y los yacimientos offshore en el mar del norte.
Cultura y patrimonio.
Cuna del liberalismo europeo, Holanda ha sido refugio de exiliados políticos y económicos, como Spinoza, y cuna de maestros del siglo de oro de la pintura con Rembrandt, el Bosco, Van Elst, Vermeer, Hals y más recientemente con Mondrian o Van Gogh, aunque este último hay que compartirlo con Francia.
Si a esto unimos un patrimonio muy cuidado y restaurado, y con ciudades muy humanas y agradables Holanda atrae cada años amillones de turista de todo el mundo, Europa principalmente pero también de EEUU, América atina, China, Japón y la India.
Los Países Bajos están densamente poblados y las ciudades ocupan buena parte del país, las distancias son reducidas y los transportes buenos. Ámsterdam es la capital pero la sede del poder judicial y del gobierno se encuentran La Haya. A pesar de la gran importancia de Ámsterdam, La Haya (Den Haag) y otras ciudades como Rotterdam, Utrecht, Eindhoven, Groningen o Haarlem muestran esa discreta elegancia que mezcla en Holanda, tecnología, modernidad, arte y cultura.
El numero de ciudades y pueblos pintorescos para los turistas y viajeros son incontables: Alkmaar, Delf, Gouda, Maastricht, Deventer, Hoorn, Enkhuizen, Leyden, Dordrecht, Niega, Amersfoort, Marken o Volendam completan un primer panorama de lo que se puede ver en los Países Bajos. Algunos son famosos por sus pintores, otros por los quesos, por la firma de importantes tratados de la Unión Europea, por sus campos de tulipanes, sus diques y pólderes, por sus molinos y esas estampas tan conocidas.
Si hablamos de museos la lista es casi eterna. Están los famosísimos Rijksmuseum, el Museo Van Gogh y Stedelijk Museum donde admirar las pinturas de Rembrandt, Vermeer o Van Gogh. Pero también hay museos especiales como el Tulip Museum, el Museo del Sexo o el Centro de ciencias NEMO. A los que habría que añadir el Jardín de Keukenhof entre Haarlem y Leyden o la fabrica museo de la cervecera Heineken también en Ámsterdam.
Ámsterdam muestra sus centralidad para la cultura, el turismo, la animación y la vida nocturna. La animación del Barrio Rojo, los famosos Coffee Shops, las galerías de arte y los comercios, restaurantes y bares completan una ciudad abierta y viva, llena de atractivos. Con su red de canales y la reconversión de antiguas zonas portuarias e industriales, Ámsterdam ha añadido nuevos atractivos como la arquitectura contemporánea y el urbanismo. Eso hace que se trate junto a París, Londres, Roma y Barcelona una de las ciudades turísticas más concurridas de toda Europa y del mundo.
Una naturaleza inesperada.
Los Países Bajos también tienen una larga costa, recortada y repleta de islas, islotes, desembocaduras de ríos y canales y con muchas ciudades interesantes, pueblos y áreas naturales. Las playas y dunas son ideales para practicar todo tipo de actividades de recreo y deportes, como ir en bicicleta, navegar o nadar.
Los Países Bajos fueron el primer país que sufrió un crack financiero basado en la especulación. En las facultades de economía se estudia la crisis de los tulipanes de 1637 que fue un ejemplo de los problemas que la especulación y la inversión en bienes irreales y en previsiones o proyecciones puede tener. Varios siglos después no hemos aprendido de ello. No obstante, este hecho nos da la pauta de la importancia económica y social de la agricultura y en especial de las flores en Holanda. Hoy en día la mayor parte de la producción se realiza en países como Kenia o Tanzania, pero Holanda sigue siendo un referente para los amantes de las flores y los jardines.
Campos de tulipanes de Keukenhof.
Pero Holanda, también es famosa por sus flores: los campos de bulbos del norte y el sur de Holanda, con sus amplias variedades de flores, entre ellas los tulipanes, que atraen cada año a miles de visitantes, en concreto durante los meses de abril y mayo. En esa época, entre abril y mayo los campos de tulipanes están en su máximo esplendor, y el súmmum es el jardín de Keukenhof, situado entre Haarlem y Leyden en la región de Holanda Occidental. A un paso de Ámsterdam y ya en ruta hacia Zelanda y las bocas del Rin, la visita de éste espectacular jardín es obligatoria, pero recuerden, únicamente entre abril y la primera quincena de mayo.
Provincias parecidas y diversas.
Ya hemos citado Zelanda o Zelandia, región del sur oeste de los Países Bajos, la zona del gran delta del Rin, Mosa y Escalda. Zelanda es la región de las playas y los deportes acuáticos, y sus pequeñas pero muy animadas ciudades en verano. Midelburgo, Vlissingen y Zierikzee son las tres principales.
Similar pero diferente, en el norte del país encontramos Frisia. Región perfecta para el deporte, el senderismo y la bici por los pólderes y los deportes de agua en sus lagos, playas. Leeuwarden y Elfstedentocht son las dos ciudades más importantes y monumentales.
¿Por qué no salir de Ámsterdam y visitar la Holanda del norte y del sur? Viajar al oeste de la capital y descubrir Haarlem, la isla de Marken, los pueblecitos de Monnickendam, Edam, Alkmaar y Volendam. Pueblos de quesos, pesqueros, mercados y tiendas con encanto. O playas y naturaleza en las playas de Bloemendaal, Bergen, Texel y Zandvoort.
Justo al sur, pero realmente a pocos kilómetros, apenas unas decenas, pasamos a la provincia de Holanda del Sur, donde está la capital administrativa La Haya, Leyden y su universidad, Rotterdam uno de los grandes puertos europeos. Delft con su cerámica y sus museos, o del lado de la naturaleza los molinos de Kinderdijk, los campos de flores, el jardín de Keukenhof y sus tulipanes legendarios o la playa de Scheveningen.
En el interior, podrás impregnarte de la deliciosa gastronomía de Brabante del norte, que mezcla atractivos urbanos y naturales. Perfecta para andar en bici y hacer senderismo y paseos sin tener que ascender cuestas. Bosques, landas y dunas de arena que rivalizan con las de Francia o Alemania. Y que decir de la gastronomía, con restaurantes reconocidos por las Guías más importantes. Los productos regionales más destacados son las verduras y frutas como los espárragos y las fresas, pero también pescados, anchoas y caviar!
El interior de Holanda también es muy atractivo. Incluye la provincia de Overijssel, que como toda Holanda reúne naturaleza y cultura e historia. Un pasado hanseático y comercial y varias reservas naturales, con el río Ijssel eje de toda la provincia.
Por último, Limburgo es la provincia más particular, ya que a diferencia del resto del país posee un relieve más accidentado, con colinas y valles lo que es algo raro en el BENELUX. Encanto, parajes naturales, el pasado minero, buen ambiente y una gastronomía que no le dejará indiferente.
La Holanda caribeña.
Holanda, como Francia es un país que no sólo se encuentra en Europa. Así, el país se compone también de territorios en América. Allí, las antiguas Antillas Holandesas se han divido en varias provincias, municipios. Estas son Bonaire, San Eustaquio, Saba, Aruba y Curaçao. También forma parte del Reino de los Países Bajos la mitad de la isla de San Martín o Sint Maarten, también en el Caribe. La otra mitad pertenece a Francia. Por tanto es posible disfrutar del buen clima tropical en estas islas que mantienen la seguridad y al estabilidad económica europea con el clima, la gastronomía y el ambiente americano.
Turismo de nicho para descubrir Holanda de una manera diferente.
A pesar de ser un destino popular los Países Bajos ofrecen la posibilidad de descubrir el país de manera más personalizada y curiosa. El turismo de nicho es el futuro del turismo, aunando calidad, experiencias más personalizadas y más autenticas. Por todo ellos, una de las maneras más interesantes de explorar el país, es como lo hacen los propios holandeses, en barco o en bicicleta. Alquilar un barco casa y recorrer los canales; o hacerlo con la bicicleta y durmiendo son nuevas maneras de viajar y disfrutar de las vacaciones.
Los Países Bajos están llenos de rutas para bici, lo que hace muy fácil cruzar el país en bicicleta. Ir en bicicleta por las planicies de Holanda es mucho más sencillo que en otros países- a no ser que lo hagas en dirección contraría a la del viento, porque el viento cuando sopla, sopla. Los canales y la posibilidad de recorrer el país en gabarra o barco adaptado es una maravilla.
Y si queremos alojarnos en un barco pero no movernos, también es posible ya que muchos de estos barcos están anclados en Ámsterdam y otras ciudades y es posible alquilar como un hotel, un B&B flotante. Los hoteles y los servicios turísticos son de gran calidad en todos los Países Bajos, por esto no hay ningún problema, eso sí, Holanda no es el destino más barato de Europa, tendremos que tenerlo en cuenta.
En definitiva podríamos decir que Holanda ofrece una amplia variedad de entretenimiento cultural y natural que merece la pena explorar. Fascinantes ciudades, paisajes pintorescos, ricas tradiciones, eventos, paisajes únicos como los molinos de viento, galerías de arte, museos, cafeterías, bares, restaurantes, arte de vanguardia, arquitectura, actividades deportivas, casi todo es posible en Países Bajos.
Welkom in Nederland!!